Brasilia - El ex jefe del gabinete José Dirceu, realizó una vigorosa defensa del gobierno del presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva y se dijo dispuesto a aclarar las denuncias de corrupción que forzaron su renuncia, al retomar el miércoles su escaño de diputado, en una agitada sesión que tuvo incluso agresiones físicas.

"Quiero que todos los diputados y diputadas sepan que vuelvo para prestar todos los esclarecimientos necesarios" ante la Comisión de Etica y el tribunal interno de la Cámara que juzga varias de las denuncias, declaró Dirceu.

"No tengo nada que esconder, en mi vida siempre fui una persona pública, incluso cuando luchaba armas en mano en la clandestinidad", añadió Dirceu, que en 1968 estuvo preso y vivió varios años en Cuba antes de regresar a Brasil clandestinamente.

El diputado del conservador Partido Progresista (PP), Jair Bolsonaro, un militar retirado, lo interrumpió gritándole: "¡Terrorista! ¡Terrorista!", provocando una reacción de un centenar de militantes del oficialista Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) en las galerías, que lo trataron de "fascista" y vociferaron "¡Brasil es el PT! ¡El PT es Brasil!".

Dirceu defendió además los 30 meses del gobierno Lula, incluyendo la política de estrictos ajustes del ministro de Hacienda, Antonio Palocci, que solía criticar cuando dirigía el gabinete.

"Durante estos 30 meses hemos enfrentado el desafío de gobernar Brasil. Veníamos de un elevado riesgo-país, de una alta inflación, de una crisis profunda, de una crisis del sector público", y desde entonces "Brasil volvió a crecer, a crear empleos, es menos dependiente", proclamó.

También defendió la política de alianzas del PT con partidos de centro y de derecha.

"No me avergüenzo y no me autocritico por la política de alianzas del PT", porque el PT tiene sólo 91 diputados sobre un total de 513 y 13 senadores de un total de 81; es por eso que "para gobernar el país era necesario hacer alianzas", explicó.

Sus declaraciones eran saludadas por la tribuna y por los diputados de su bancada, provocando también interrupciones de opositores enfurecidos por el negro panorama que presentaba de los gobiernos anteriores.

Al retirarse del hemiciclo, los ánimos estaban caldeados y hubo un forcejeo entre los diputados Alberto Goldman (del Partido de la Social Democracia Brasileña, PSDB, del ex presidente Fernando Henrique Cardoso) y Alberto Fraga, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB, centro, aliado del PT).

AFP